lunes, 11 de septiembre de 2017

PU(N)TOS FINALES...

''No me lo puedo explicar'' aún después de casi un año.  Este es el título de la canción que escogí mientras te grababa la que sería la última vez de mi vida.  Y aún, a día de hoy , diez meses después, no me lo puedo explicar. Dueles, dueles tanto que no consigo que mi herida se cierre. Aun no había pasado nada, y sabía todo lo que te iba a decir, todo lo que iba a escribir cuando pasará. Y pasó, y pasó que lo único que pude escribir fue: '' Hoy en mi corazón llueve.'' Joder si llueve, diluvia. Pero lo peor es que la tormenta sigue desde entonces. No ha parado, y cada vez me dueles más. Y yo, que creía que solo hacían falta 21 días para acostumbrarse a algo, me doy cuenta de que no, de que ni en 200 días me he acostumbrado y me dueles. Me dueles tanto. Te llevaste todo de mi, sin dejar absolutamente nada más que vacío. Un vacío del que me di cuenta que nadie es capaz de llenar, un vacío que paradojicamente, pesa. Un vacío que me hace buscar tu amor en otros lados, llevándome al completo fracaso, aumentando así, mi vacío. ¿Por qué me sigues doliendo? ¿Por qué se acaban las cosas? ¿Por qué te acabaste tú?
Te quise tanto, como nunca nadie he querido. Siempre tú, tan.. a mi lado. Qué remedio, no podías irte a otro lado. Pero yo sabía que me querías y te llenaba de todo mi amor. Yo creo, que mi gran defecto es que, a mi manera, quiero demasiado, y eso pasa, que no todos lo saben aguantar, que no todos saben digerir cuando alguien quiere, porque sí, y tú... tú me vaciabas de amor, pero aún así siempre había más, nunca se me agotaba. Me relajabas, me llenabas de algo, de felicidad, de magia, o de no sé qué, y ahora que nada de eso pasa, pasa que lloro, que lloro y no estás, que lloro y no te puedo abrazar, que lloro y no siempre es por ti, pero sé que lloro porque no te tengo a ti, para irnos bien lejos, a pensar, para sentir, que en mi eterna soledad, estabas tú. Para quererme un poquito, y ya, con solo ese poquito, yo estaba llena, para seguir aguntandolo todo.  Dicen, que el 13 es el número de la mala suerte, pero para mi, el 14 está lleno de horrores.
Te fuiste, y es verdad, y aún sueño que es mentira, que estás, y que no te vas, y que te puedo abrazar. 
Y que ingenuos, ellos, que se piensan que busco a alguien para ser feliz, a mi otra mitad, yo solo te busco a ti, y la ingenua soy yo.
Han pasado muchos meses, y yo, te he llorado como la que más, será que detrás de este cuerpo, que parece que no sabe amar, a ti te quise como no quise a nadie en mi vida. 
Y es que siempre, acabo mal, por querer de más. Como pasó contigo, como pasó con el que no te quería (ni el que me quería a mi) y como pasó con los que no has llegado a conocer y como pasará.
17 años, y ojalá estuvieras aquí un día más, 11 meses y todavía dueles. 
Te quiero.